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El vídeo de esta chispa es increíble, pero lo que lo realza es la elección musical. Crédito: Josu Irisarri |
La electricidad es extremadamente peligrosa, pero también extremadamente útil cuando podemos contenerla y enviarla de A a B. Resulta que no necesitamos cables, tubos con gases especiales o láseres para hacer eso; incluso el sonido puede usarse para manipular cargas eléctricas para que se comporten como deseamos, según revela una nueva investigación.
Los investigadores analizaron chispas eléctricas, liberaciones caóticas de plasma que tienen una variedad de utilidades en la tecnología. Es posible que haya visto liberaciones de plasma similares en bobinas de Tesla o bolas de plasma. En general, estas chispas son muy caóticas y se usan en lugares donde ese caos es manejable o no demasiado dañino. Piense en matar bacterias, soldar, electrónica de alto voltaje, producir sensaciones táctiles e incluso encender el combustible de algunos motores de automóviles.
Tener más control sobre este plasma puede mejorar esas aplicaciones, e incluso abrir la puerta a más. Los investigadores han descubierto cómo se puede usar el ultrasonido para controlar estas chispas de formas increíbles. Se pueden hacer que se desplacen alrededor de obstáculos y golpeen puntos específicos en un objetivo, incluso cuando el material no es un conductor eléctrico.
"Observamos este fenómeno hace más de un año, y luego nos llevó meses controlarlo, e incluso más tiempo encontrar una explicación", dijo en un comunicado el investigador principal del estudio, el Dr. Asier Marzo, de la Universidad Pública de Navarra.
Ver el proceso en acción es casi mágico, pero funciona utilizando los efectos que el plasma tiene en el aire contra sí mismo. La chispa calienta el aire, reduciendo su densidad a medida que se expande. Las ondas ultrasónicas se utilizan para dar forma a este aire caliente y menos denso. Las chispas luego siguen naturalmente esas regiones porque tiene un voltaje de ruptura más bajo.
Otro método actual para mover las chispas en la dirección correcta es usar destellos láser con una sincronización precisa para crear una descarga eléctrica en el aire. Un enfoque así no podría funcionar en materiales delicados u organismos vivos.
"El control preciso de las chispas permite su uso en una amplia variedad de aplicaciones, como ciencias atmosféricas, procedimientos biológicos y alimentación selectiva de circuitos", dijo el coautor, el profesor Ari Salmi de la Universidad de Helsinki.
"Estoy entusiasmado con la posibilidad de utilizar chispas muy débiles para crear estímulos táctiles controlados en la mano, creando quizás el primer sistema Braille sin contacto", añade el primer autor del estudio, Josu Irisarri, de la Universidad Pública de Navarra.
El estudio se publica en la revista Science Advances.