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| Imagen de -MayaQ- en Pixabay |
Con la cápsula radiactiva que desapareció recientemente y luego se encontró contra viento y marea, los usuarios de Reddit han estado compartiendo varias historias de personas que no han tenido tanta suerte y han tenido encuentros con materiales radiactivos.
En un incidente particularmente angustioso en la Ciudad de México en 1962, una familia estuvo expuesta prolongadamente a una fuente radiactiva y comenzó a enfermarse sin saber por qué. En marzo de 1962, una familia se mudó a una casa en la Ciudad de México y dentro había un pequeño contenedor de plomo.
"La fuente se dejó a la familia para que la mantuviera y vigilara sin que ninguno de los miembros de la familia supiera exactamente qué era el recipiente y qué contenía", señaló un informe sobre los envenenamientos elaborado por los médicos de la familia.
En algún momento entre la mudanza y abril, la fuente radiactiva se sacó del contenedor de plomo y terminó en el patio. Luego fue encontrado por el niño de 10 años, quien puso la cápsula radiactiva de cobalto-60 en su bolsillo y la llevó a la casa.
Luego, su madre sacó la cápsula del bolsillo del pantalón y la colocó en un cajón de la cocina. A fines de ese mes, “la madre de la sobreviviente, vino a vivir a la casa. En ese momento notó por primera vez el ennegrecimiento de los vasos de vidrio que estaban guardados en el mueble donde estaba la cápsula”.
El ennegrecimiento del vidrio se ha descrito en otros informes de exposición a la radiación. Por extraño que haya sido, no alertó a nadie de la familia sobre lo que estaba sucediendo.
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| El niño puso la cápsula radiactiva de cobalto-60 en su bolsillo y la llevó a la casa..IMAGEN: LANL |
El equipo intentó determinar las dosis de radiación que recibió la familia, lo cual no fue una tarea fácil, dado que se movían dentro y fuera de la casa, y el equipo tuvo que tener en cuenta cosas como cuánta radiación fue dispersada y absorbida por objetos alrededor del casa. Usando información del único sobreviviente sobre las rutinas de la familia, el equipo pudo estimar la exposición.
El niño de 10 años recibió una dosis alta, en gran parte recibida durante su contacto directo con el cobalto-60. Mientras la fuente radiactiva estaba en el cajón, él y su hermana estaban menos expuestos a ella mientras jugaban afuera. Sin embargo, la madre, que estaba embarazada, recibió una gran dosis durante este tiempo debido al tiempo que dedicaba a preparar las comidas.
Esto cambió cuando empezó a sentirse mal -debido a la radiación- y su suegra se hizo cargo de ella mientras ella descansaba.
El 29 de abril, el niño de 10 años murió, luego de lo cual su hermana de 2 años pasó más tiempo adentro con la familia, más cerca de la fuente. La madre murió el 19 de julio, momento en el que se encontró la cápsula y se la sacaron de la casa. Sin embargo, la radiación ya había hecho daño y mató a la hija de 2 años el 18 de agosto y a la abuela el 15 de octubre.
El padre, el único superviviente del incidente, recibió alrededor de 990-1200 dosis de radiación absorbida (rad) dado el tiempo que pasó lejos de la fuente, mucho menos que los 4700-5200 rad del niño.
Fuente: https://www.iflscience.com/the-tragic-story-of-a-boy-who-found-a-radioactive-capsule-and-brought-it-inside-the-house-67368